Amigos del abuelo Cacho - Mar del Plata

Hablamos con el Abuelo Cacho y tiene cerrado el Restaurante porque no podia con tanto trabajo y se enfermo.Ahora convirtió la gran casa que tiene en un Hostel con desayuno incluido, tiene todo precioso y nuevo.Ya solo prepara comidas a los huespedes del Hostel por encargo.Es fantástico el Abuelo. Un 10 por sus ganas de trabajar y atender a todos los que pasan por su casa.

Deberían actualizar la info. Ya q fuimos en familia y figuraba.ahora abierto y estaba todo oscuro y cerrado c candado era tipo 22hs d un sábado. Me pareció mal ya q era d noche y están en medio D un barrio....no tenes otra alternativa a donde ir...

Muy linda atencion, uno se siente como en su casa, muy rico todo, a metros del Complejo Punta Mogotes, vale la pena visitarlo, muy buen precio todos sus platos, no hay que irse de Mar Del Plata sin antes pasar a comer los deliciosos platos del Abuelo Cacho.......EXCELENTE..!

Comimos una carne buenisima y lo que mas nos gusto fue ver como el abuelo lo preparaba todo, ademas el precio muy barato.Super recomendable.

Se trata de un pequeño salón, de apenas 7 mesas, dentro de una casa particular, muy cerca de las playas de Punta Mogote (en mi opinión, las mejores de Mar del Plata)Regentada por el abuelo Cacho (a quien podemos ver en la foto con dos de sus nietos), argentino de origen que tuvo en su juventud varios restaurantes en España, este hombre parece encontrar la felicidad en dar de comer a sus amigos entre los que te puedes encontrar con solo traspasar su puerta.Parrila argentina de alta calidad y módicos precios, costillar, chivo, cochinillo o cordero a la estaca, haciendose a fuego lento durante horas...platos típicos: peceto al horno, milanesas, postres caseros (impresionante el puding con dulce de leche y nata), buenos vinos del pais, y algunos platos reminiscencia de su paso por España: pulpo a la gallega, paella, tortilla a la española, calamares a la romana, jamón iberico (de verdad, no la imitación terriblemente salada que hacen en Argentina)...todos los platos hechos con cariño y servidos en abudantes raciones y a un precio de risa.Conviene reservar, sobre todo si quereis alguna carne a la estaca (altamente recomendable)Un lugar excepcional en su relación calidad-precio