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Sprzężenie zwrotne
Przekaż informację zwrotnąLlegamos al lugar temprano para no tener que esperar, total que con solo dos mesas delante tuvimos que esperar 45 minutos. En ese tiempo iban quedando mesas libres, exactamente 6 y la camarera no las limpiaba ni las preparaba para seguir pasando a gente en espera. Estando embarazada de 8 meses no me dejaron ni entrar ni me dieron opción a coger una silla para la espera. Cuando por fin entramos y pedimos, a los 40 minutos de pedir nos comunican que no había sopa por la cual esperaba mi hijo con mucha hambre ya, algo q se supone q uno mira rápido porque debe estar echa y es simplemente calentar. (Cosa que ni borraron de la comanda).Lo cambiamos por fabada algo rápido para matar el hambre del peque y estaban pasadas, por lo que el pobre terminó comiéndose el pan que sabía a chicle, aún teniendo ellos un horno en el comedor donde podrían darle un toque de calor para mejorarlo. A toda la espera y preguntas por nuestra parte, malas caras y malas contestas por parte de los camareros, un señor con caras largas y una chica mirando fatal por encima de las gafas. Cuando por fin llega la comida no habían papas arrugadas para mi bacalao encebollado, con lo que sin preguntar o dar opción a cambios me lo traen, un trozo muy pequeño con a penas dos tiras de cebolla y una de pimiento acompañado por el culo de una batata partida en dos (cobrándome las papas) lo cual a mí no me gusta, hubiera pedido otra cosa si lo hubieran avisado. El bistec llega como suela de zapato, la chuleta versión mini y los calamares crudos más pálidos que nuestra cara tras tanta espera para comer y encima mal. El servicio de la mesa se cobra a 6 euros cuando trajo solo 5 panes, uno por cabeza, chicloso y tamaño pan de pulguita. Pésima atención, cero disculpas, larga espera para ni comer y pasar un mal rato y encima muy caro todo para lo q sirven.
Local feo y desfasado que pide a gritos una renovación. De entrante, nada más sentarte, te ponen sin preguntar , el pan correoso y sin calentar para luego cobrártelo, aunque no lo hayas comido y, ¡¡ Ojo !!! porque encima te cobran más panes de los que te ponen. La camarera que nos atendió una con gafas nos puso 4 panes y luego en la cuenta NOS COLÓ 5 . ¡ Qué lista la señora !!! Así que mejor revisar la cuenta por si acaso. Los precios antes eran contenidos , pero después del confinamiento, han subido los precios de algunos platos: el pollo al ajillo ha pasado de costar la 1/2 ración 5 euros a 6.50 y la entera de 11 a 13 euros. ¡¡¡ CASI NA !!! Pedimos: carne con papas que estaba muy rica, pero la ración era cara y escasa. calamares, que no son tal, sino anillas congeladas llenas de hebras, pero bien preparadas. Por cierto, han reducido la cantidad, ahora los calamares te los ponen contados. huevos al estampido sin chorizo por ningún lado, también escasitos y caros . bacalao y fogonero, el bacalao bueno, aunque la salsa demasiado aceitosa y el fogonero se notaba que lo acababan de descongelar muy soso , no sabía a nada . las papas arrugadas de mala calidad ,MUY GRANDES, CRUDAS Y FRÍAS , no se molestaron ni en calentarlas siquiera. Para colmo, las papas arrugadas que se supone que vienen incluidas como guarnición con los pescados , aquí te las cobran por separado. ¡¡¡ alucinante lo que hacen pa sacarse unos euros de más !! En fin, no vuelvo más, ya no resulta una buena opción para ir a comer, habiendo tantos sitios buenos en los alrededores.
Un buen lugar para comer carnes a la brasa o calamares. Tienen variedad de platos y lo mejor es que tienen un amplio horario. El personal muy atento y servicial. Muy buenos precios.
Se trata del típico guachinche,con comida en general bastante buena: croquetas,fabada,calamares, pollo a la brasa,...mi desencanto viene de los tiempos de espera: tardaron sobre 45 minutos en traernos los segundos y hemos estado un miércoles para almorzar,con un comedor lleno de comensales,pero no desbordado. Como estamos de vacaciones,pues nos lo hemos tomado con tranquilidad,pero sinceramente sitios similares para comer hay muchos en el norte de tenerife y no tardan tanto en atender,por lo que no repeteríamos en este restaurante.
Restaurante sencillo donde puedes encontrar una carta variada de comida local casera: escaldón, croquetas, carne fiesta, garbanzas, fabada...Probamos las croquetas y la fabada. Muy sabrosas. Las croquetas las hacen de jamón, de pescado y de espinacas y las sirven con un poco de ensaladilla. Luego comimos un filete de fogonero a la plancha y potas en salsa, estas últimas demasiado picantes. Como punto negativo decir que el servicio fue muuuuuy lento que en hora punta hay demasiado bullicio en el comedor. No obstante repetiremos para probar el escaldón y las carnes a la brasa.
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