Carmen De Bolivar - Suba

Cuando trabajaba cerca a este sitio, almorzar ahí es un placer. Es comida costeña pero más enfocada hacia la parte de Bolivar y Cesar. El chivo era delicioso y las sopas muy buenas con el sazón costeño.Recomiendo ir porque es un costeño diferente más alla del pescado frito y el camarón. Es una delicia. Ir temprano porque se llena.

Hay gran variedad de platos para escoger en la carta, y siempre ofrecen plato del día. La atención es buena, pero un poco lenta. En términos de precio, es un tanto costoso. El sabor de la comida es delicioso, los patacones y el arroz con coco, son bastante buenos. La única observación que les haría es que le bajen un poco a la sal y al azucar. Pero en general la comida es bastante buena.

Fue una lástima que la comida fuera excelente y los precios muy cómodos a pesar de no ser un restaurante de élite. La limpieza y la calidad del servicio fueron destacables. Los meseros fueron muy amables y la comida siempre fresca.

Fuimos a desayunar un día después de un puente festivo; nos sirvieron un pegamento de arroz que, sin temor a error, estaba abrumado. El chocolate ni siquiera era espuma y era súper frío. En el sitio sólo había una persona que asistió, preparó, hizo una caja y levantó la cresta. Creo que no estaban preparados para vender el desayuno ese día, la comida no era fresca y el servicio era muy malo. Pedimos el cambio de comida (por las condiciones de ella) y acordaron cambiar los huevos y el arroz, es decir que eran concienzudos del producto que nos estaban proporcionando: Un par de veces fui al almuerzo, pero después de esta experiencia no regresaré o recomendaré a nadie.

Llegamos a la 1pm, el camarero que nos atendió parecía cansado. Tomó nuestra orden de manera descuidada y con mala actitud, incluso agarrando mi pelo en todo momento. Pedimos comenzar con bolitas de yuca con suero y nos dijeron que no tenían. Cambiamos nuestro pedido y ordenamos carimañoles como plato principal, uno pidió mojarra frita y el otro sopa de mariscos. Después de 10 minutos nos dicen que no hay mojarra frita y nos ofrecen robalo en salsa, a lo que aceptamos. Aún así, las entradas no llegaron y a las 1:22 otro camarero nos informa que ya no tienen filete de pescado en salsa, por lo que decidimos pedir la cuenta por las bebidas ya que las entradas nunca llegaron. El camarero nos informó que las bebidas serían cortesía del restaurante, pero la falta de comunicación y el tiempo perdido nos quitó el deseo de comer.