Parrilla Del Este - Oviedo

Hay una palabra que lo define encantador en una calle excepcional también se recomienda en el centro histórico un marco incomparable

Primera decepción... un restaurante en Asturias que no tenía fabada... y los cachopos eran del tamaño de un san jacobo y de los seis que pedimos, solo dos tenían el relleno de jamón y queso, a los otros cuatro les faltaba el jamón... en resumen, no lo recomiendo.

Realmente no esperaba encontrar un lugar así en Oviedo... el menú sonaba bien, pero la verdad es que fue una completa decepción. El plato de cecina con queso de cabra resultó ser media loncha de cecina (¡literalmente, media!) y una rodaja de queso de cabra en lonchas. El cachopo era como un san Jacobo con queso tranchete. El arroz con leche resultó ser una sopa de leche con arroz flotando. Le doy una calificación de 2 porque la fabada sí estaba buena... lo único. Realmente una lástima, supongo que viven de turistas despistados... y el local es muy bonito, la verdad.

Cena familiar con amigos a la carta. Platos sencillos para los niños, con muchas opciones para celiacos. Ensalada de pulpo, chipirones a la plancha y espectaculares “cachopos” (plato típico asturiano a base de dos enormes filetes de ternera rebozados con jugoso relleno entre medias) de varios sabores para los padres. Me encantó el de cecina con queso de cabra, muy recomendable. El personal honrado, amable y especialmente paciente con los más pequeños. El local es acogedor y decorado con buen gusto, no se ve demasiado a pesar de lo céntrico que se encuentra (está justo al lado del ayuntamiento, camino de la catedral). Lástima que la terraza estuviera ocupada (tiene pocas mesas) pues entonces ya sería de lujo absoluto la cena.

Restaurante muy bien ubicado, con una decoración encantadora y un menú que se destaca por su falta de originalidad, sin nada especial para destacar positivamente ni negativamente, excepto por la atención algo descuidada del personal de servicio.