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Sprzężenie zwrotne
Przekaż informację zwrotnąFuimos a comer a Grazie Pizzería y me sorprendió gratamente, ya que no tiene nada que ver el aspecto de fuera con lo acogedor que es el restaurante. Pedimos los canelones que estaban exquisitos y la pizza Grazie con palmito ¡y nos encantó! Las cantidades son abundantes y la relación calidad-precio está muy bien. De postre, el volcán de chocolate es una auténtica explosión de sabor. El servicio fue muy bueno y muy atento en todo momento. Tomamos el café y la copa en la terraza, que estaba estupenda y fue muy agradable. ¡No os dejéis engañar por la apariencia exterior! ¡Merece la pena ir!
Nunca he probado una pasta casera tan deliciosa en mi vida, ¡totalmente recomendado! ¡Los postres son increíbles! El personal es muy atento y servicial en todo momento.
Fuimos en familia a cenar, éramos 5 personas. Comimos una milanesa napolitana para compartir y un par de pizzas. Las porciones eran suficientes aunque echamos de menos las papas fritas de acompañamiento para la milanesa. Las pizzas eran de tamaño mediano pero suficientes para dos personas, destacaban por su buen sabor y la cantidad de ingredientes, eran muy completas. El local ha sido completamente remodelado y sobre todo, se ha limpiado a fondo y se nota... el antiguo dueño era un poco descuidado, pero este nuevo equipo le ha puesto ganas y cariño. La atención fue muy buena, ¡volveremos!
Hemos repetido ya que probamos el menu del día y muy bien. Tienen pasta casera, milanesa napolitana un 10.y pizzas tamaño normal para dos. Postres caseros y buena atención. Seguiremos llendo
Lleva poco tiempo abierto y no tiene nada que ver con el negocio anterior. Completamente transformado, limpio y con una decoración muy original y acogedora. La comida se nota que es casera, me cuesta creer que hayan estado allí quienes dicen lo contrario. Las pizzas están riquísimas y suficientemente grandes para 2 personas, deben ser de unos 30 cms. La pasta al dente y los canelones muy recomendable s. Nos tomamos también churrasco delicioso con muy buen sabor. Todo ello regado con un vino tinto muy bueno que no recuerdo el nombre y que nos aconsejaron. Ambiente muy agradable y familiar con un personal muy cercano. Nos invitaron a los chupitos tras el café y si nos hubiera sobrado comida nos la podríamos haber llevado. No fue el caso, nos lo comimos todo.