Pinkoco - Madrid

Un lugar decorado con un montón de goteo. era una vieja tienda y se ha convertido magistralmente en un bar. la atención de los camareros es excepcional, y el menú de cócteles muy variado. el aforo es muy pequeño por lo que no es fácil de entrar, de hecho hay una campana en la puerta y si el lugar está lleno no es posible acceso, lo que garantiza el ambiente tranquilo del interior.

El bar ficus es un buen lugar de bebidas y algunas comidas. el tamaño de la barra es pequeño, pero su decoración es exquisita. los cocteles de buen gusto fueron grandes de sabor y magnificos en la elaboración visual. los camareros eran amistosos y flexibles, con un toque de agradable ironía. el bar no es para las personas que buscan pubs y bares tradicionales españoles, o por la cantidad de alcohol, o por el precio. altamente recomendado.

Es un lugar muy agradable para probar cócteles que también tiene una presentación de 10. el personal es muy atento y el lugar tiene una decoración muy cool. es decir, como es un pequeño lugar, tienes que esperar un poco porque suele estar lleno y no hacer reservas. ¡Recomiendo la mula de moscow aunque ya estoy deseando probar de nuevo todo!

Bonito lugar para tomar un cóctel. todos los que pedimos eran muy buenos, tanto el amaretto agrio como el pomelo. el servicio es muy amable y atento. Volveré porque tienen una gran variedad y son muy buenos.

De los bares mas bellos que vi hasta ahora en Madrid. Ubicado en las callecitas de Chueca, Ficus lleva la calidad del ambiente a otro nivel. Lleno de plantas y adornos, te invita a sentarte en sus mesitas y tomarte unas copas. La atención se lleva cinco estrellas, fueron amabilísimos y muy divertidos! Tomamos Water Lilly: Ginebra, violette, lima y limón, flor de sauco. Negroni Para recomendar y sin dudas, volver!