Restaurant Familia Samarin

Excelente lugar, la comida muy rica, lo que más me encantó del lugar fue el vino de la casa un sabor único y que aún sin ser de marca no le pide nada a los demás y eso lo hace único! la atención excelente, lo recomiendo y volvería a venir!

Un lugar de esos que es necesario visitar cada vez, la comida muy rica, los vinos excelentes, puede uno comprar una cata de vinos y probar al mismo tiempo quesos y pan ruso, además de poder entrar al museo ruso, muy bonito lugar histórico para aprender de su cultura y de como habitaron este valle.

Buena experiencia en el Valle de Guadalupe, lugar donde se combina el color y el sabor, es así como se llega al sabor de la pizza rusa, ese tostado de su pan, esa combinación del churrasco, el chorizo, pepperoni, acompañándolo con un espaguetti.Simplemente excepcional.

Restaurant con comedor estilo rustico, no tiene clima artificial y podria ser un poco incomodo en algunos dias calurosos como cuando fuimos nosotros, nos toco mal dia, el servicio excelente, llegamos sin hambre pero con ganas de una probadita, pedimos Jarra de Sangria, empanadas de queso y carne, pizza llamada combinacion, simplemente riquisimo, vale la pena pasar por ahi!Aparte increiblemente economico!!

Restaurante sencillo, pero decorado con muy buen gusto (imagino que al modo en que lo hacían los inmigrantes rusos que llegaron en 1905 a la región). La comida es deliciosa y los vinos, quesos y conservas que produce la familia también lo son. Sin duda, un restaurante que se debe visitar, aunque proliferen los de comida gourmet por todo el Valle de Guadalupe, y a los que no pide nada.