Lower Deck - Ciudad de México

Es una gran decepción que la comida fuera horrible porque el lugar es bastante bonito. Creo que no sirven comida de la misma calidad que en las fotos, ¡nos sentimos engañados! En las imágenes, la langosta se veía fresca y enorme, pero en la realidad, sabía y lucía como si la hubieran comprado en una caja congelada de Sam’s, ni siquiera en Costco, ugh, el sabor fue horrífico. Sin embargo, el mesero fue muy amable. El gerente, no tanto; le pregunté si podía tomar una foto en las escaleras y me respondió que el área ya estaba cerrada, aunque a mí me parecía que estaba abierta. ¿Recomiendo la comida? ¡Absolutamente no! ¿Es un lugar bonito con un buen mesero? Sí. La comida no es la misma que la de las fotos. Nos sentimos engañados, como si quisieran recortar costos, y lo hicieron en la comida: sabía y lucía como una langosta de caja que compras en Sam’s Club. Un sabor asqueroso. La verdad, la comida fue una decepción. El lugar es súper lindo y el mesero muy amable. El gerente o el señor que estaba allí, no tanto; le pregunté si podía tomar una foto en las escaleras y me contestó que ya todo estaba cerrado. Pero se veía abierto. En total, no regresaríamos, aunque es una pena porque el lugar es lindo y tienen buen vino y servicio.

Excelente servicio y atención comida de primera calidad y muy buena mixologia

Hace un año fuimos y fue espectacular. En esta ocasión, la calidad de los alimentos, la presentación y los sabores dejaron mucho que desear. Lamentablemente.

La comida es deliciosa. Pero el servicio marca la diferencia. Es un imprescindible.

El lugar es espléndido, en una esquina famosa de la Plaza Río de Janeiro, en la colonia Roma Norte. Desde la llegada, la hostess es amabilísima, lo mismo que el trato del mesero. La coctelería es genial, pero la carta de cervezas es limitada (digamos que cumple con lo que se espera de cualquier buen restorán). En el rubro bebidas se debe tener cuidado al distinguir y aclarar conceptos, ya que, al pedir un tequila blanco, el mesero interpreta como cristalino , y ahí va una diferencia enorme de precio. Es importante tener claro lo que se desea del menú porque las recomendaciones del mesero (siempre amable y atento) apuntan a lo más caro, no necesariamente a lo que el comensal está buscando. En cualquier caso, la comida es buenísima, pero la elección ya es cosa de cada quién. Vale la pena tener la carta a la mano para conocer y valorar el peso de la recomendación. Los postres y el café no tienen pierde. Para los nostálgicos de Nueva Orleáns, como yo, el lugar recuerda ciertos ambientes de por allá. La música es buena, pero nunca escuché nada que me hiciera recordar Bourbon Street. Es claro que el restorán no busca recrear por completo las estampas del Mississippi. La atención es cálida y cousy. La Cubierta de Abajo bien vale la pena.