Casa Torres - Calafell

Lis pollos y las patatas riquísimos. Lo único malo es que en verano aunque llames para reservar tienes que hacer cola igualmente y en el sitio hace mucho calor. Deberían poner una cola rápida para quien tiene ya el encargo hecho. Pero vale la pena ya que los pollos y las patatas para mi de los mejores de la zona

Nos habían hablado muy bien del sitio y lo mejor fue el trato de los camareros. La comida no está mal pero es muy mejorable, pedimos lenguado que estamos convencidos que no era lenguado por la textura y sabor. Al final cuando pedimos la cuenta nos hicieron esperar 20 minutos mientras veíamos que la propietaria y encargada de cobrarnos hablaba con unos clientes y los camareros nos pedían disculpas. Al hablar con ella le echó la culpa a ellos, muy triste y muestra cómo es una persona...

A principios de agosto hice un encargo en el establecimiento Casa Torres de Cunit (C/ Juli Cesar, 11), consistente en dos pollos asados, una ensalada mixta, ensaladilla rusa y patatas asadas. La calidad de las ensaladas, la patatas y uno de los pollos era correcta tirando a normalita, y digo uno de los pollos, porque el otro se encontraba en mal estado. Olía y sabía a podrido. Evidentemente, no nos lo comimos, sino que lo volvimos a llevar al establecimiento. En el momento en que llegamos había mucha cola en la puerta, y como no teníamos intención de montar un número sino de que nos diesen una explicación, llamamos a la encargada por la puerta lateral para hablar con ella. Le devolvimos el pollo. Nos dijo que era algo que nunca le había pasado (espero que fuese cierto, sobre todo por el bien de los clientes que podrían terminar intoxicados), y nos dijo que nos debía un pollo y que nos pasásemos a por él cuando quisiésemos . En ningún momento nos ofreció devolvernos nuestro dinero ya que, tras esta experiencia, evidentemente, no volvimos a comer nada en este sitio. Si que nos fijamos (cualquiera que vaya podrá verlo) en que tienen un montón de pollos, ignoro si asados del todo (en cuyo caso se quedarían fríos) o a medio asar (para terminarlos después), sobre un mostrador, dentro del asador, tapados con papel albal. No soy una experta en cuanto a manipulación de alimentos, pero, especialmente en verano, supongo que no son las mejores condiciones higiénico-sanitarias que se pueden dar. En fin, que ojalá mi caso sea aislado y que esta situación no se repita. Evidentemente, no recomendaría el establecimiento.

Han cambiado de propietarios y ahora ofrecen deliciosas comidas caseras, además de los deliciosos pollos asados y unas patatas que nunca antes había probado y están deliciosas. Los propietarios son personas muy agradables. Recomiendo que, si pasan por allí, no pierdan la oportunidad de ir.

Personal soseras y poco acogedor. pollos muy mediocres...No anima a probar mas cosas. Creo que ha cambiado de dueños y a peor.