IL Mercatino - Bogotá

En búsqueda del sabor a leña de un buen horno para pizzas llegamos a il mercantino en la zona de Quinta Camacho, resultó un lugar agradable, su patio interior le da un ambiente cálido en el día, escogimos la pizza de bresaola rugula y brie la cual estaba crujiente y de muy buen sabor, la frescura de la rugula balanceaba muy bien sus otros dos ingredientes. Para la próxima prosciutto & pera. El vino a copas en apenas en lo justo.

Es una lástima que el lugar que es tan bonito y con un servicio tan bueno, ofrezca una comida poco especial. El lugar es divino y no volvería porque la comida no es rica.

Personalmente me gustó, pero cuando los demás acompañantes quedan insatisfechos se debe reconocer que les falta mejorar bastante. Fue un almuerzo entre semana con reserva. Al llegar al sitio, es agradable, buen ambiente en general. La atención del mesero oportuna para ofrecer la carta y las bebidas. La carta es variada pero es una lotería escoger un buen plato. El mio fue un Peperone Ripieno delicioso, excelente, recomendado. Los otros platos fueron un Fideua al Frutti con camarones que es como una paella pero con fideos según la descripción pero es una cazuela llena de fideos secos con 7 camarones minatura contados. Los que pidieron este plato lo encontraron empalagoso e interminable, insufrible, puros fideos secos acompañados de una salsa que parecía mayonesa. Salieron muy decepcionados. El otro plato fue Paupiettes, buen sabor, porción pequeña de pasta sin embargo no hubo queja de este aunque tampoco deslumbró. Se pidió postre de naranja (Crostata di Arance) y un tiramisu. Despues de 30 minutos de esperarlos preguntamos al mesero quien nos informó que tuvieron una confusión (no los habían pedido) pero que el tiramisu sería una cortesía por la demora. En general deben mejorar algunos platos. El precio ($27.500) por unos fideos secos y con "camarones" no se justifica. Personalmente si volvería, pero quienes me acompañaron creo que no.

Un muy buen restaurante de comida italiana. Muy recomendada la pizza con manzana, los ravioles de prosciutto y el mejor plato la pancita de cerdo. La atención es muy buena

Vinimos invitados a este restaurante italiano famoso ya en Bogotá por sus pizzas y platos Italianos, pedimos de entrada una pizza de pera, que estaba para chuparse los dedos de segundo plato el rissotto frutti di mare! Y si la pizza estaba buenísima este arroz estuvo mundial. De postre un tiramisu , un par de botellas de buen vino italiano, recomendación de la somelier. Vale la pena !!