Ca l'Enric - Olot

Molt, molt , molt be, super recomenable, ambient, local, servei, producte, espero poguer-hi tornar aviat, gent amb ofici i molt valents, fer un restaurant gastronomic amb un indret aixi es molt arriscat, us desitgem el millor, salut i sort.

Sin dudarlo, Cataluña puede considerarse uno de los lugares más gastronómicos de España junto con el País Vasco. Sin duda, los hermanos Roca son probablemente el emblema, pero el número de estrellas también es impresionante. Mesas modernas y mesas tradicionales se encuentran una al lado de la otra y la alegría de quienes aprecian la variedad de cocinas es encontrarse ante platos de altísimo nivel y, a menudo, incomparables de un establecimiento con estrellas a otro. Ca L'Enric no se encuentra en la ruta de la playa ni en una autopista muy transitada sino en el noroeste de Cataluña en La Vall de Bianya, un municipio de la provincia de Girona. Una comarca también llamada Garrotxa que es un interior muy natural donde venir a hacer senderismo y recargar pilas en, entre otras cosas, el parque natural de la zona volcánica. Unos cuantos pueblos medievales en esta preciosa ruta por el Prepirineo español y aquí una gastronomía aprovechando los productos de la tierra fértil. La mesa estrellada Ca L'Enric no está en un pueblo sino en la carretera hacia Andorra. Preciosa masía del siglo XVIII que en su momento fue hotel, totalmente reformada y decorada al día. Es decir, el uso de materiales como piedra, madera y también metal oxidado. Se tendría la impresión de que en 2014-15 se ha convertido en norma combinar estos materiales y que la arquitectura de un establecimiento de calidad casi debe sobresalir en su estructura y distribución. El exterior es de color antracita, probablemente relacionado con el color de la lava seca; algunos cipreses y bojes; la gran inscripción en una de las paredes. Una apariencia moderna y al mismo tiempo local. Una vez que hayas rodeado el muro bajo, es al pie de una pendiente que llegarás a la muy bonita terraza que es al mismo tiempo un patio donde encontrarás sombrillas y sofás tipo bambú y todo ello combinando los tonos. y materiales de la casa. Esta terraza de diseño, protegida del viento, es muy agradable y es aquí donde le recibirán y le invitarán a tomar un aperitivo. Qué buena idea haber creado una chimenea exterior en un rincón que permita permanecer al aire libre cuando hace buen tiempo. Debes saber que este establecimiento existe desde hace cuatro generaciones (1882) y ofrece una cocina creativa contemporánea pero basada en las tradiciones culinarias de la comarca con la familia Juncà; Isabel y Jordi en la cocina, Joan en la sala y en la bodega. Montaña Cocina pero totalmente revisada que sólo utiliza productos del entorno. Recetas transmitidas de generación en generación y todas reelaboradas. Todo esto me pareció realmente muy interesante en concepto. Sentados en la terraza tomamos dos copas de cava y recibimos el menú. Menú que cambia cada temporada con un menú degustación a 98 euros, pero antes de hacer nuestra elección, nos presentan un primer aperitivo que representa una cesta con una hoja y dos setas. Esta hoja de roble nos recuerda a la de Azurmendil. Una hoja que ha sido elaborado como un crujiente pero con una mezcla de setas silvestres reducidas a polvo y reconstituidas como una hoja de roble con un sabor a sotobosque muy pronunciado. Junto a él encontramos dos conchas de merengue que representan setas rellenas de un preparado de boletus primaverales de la región de Cistella. Tercer aperitivo, la galeta de Mas Farro que es una galleta de queso muy crujiente sobre la que encontraremos una mousse en la que también encontraremos queso. Tres pequeños bocados que confirman que no sólo hay trabajo e investigación en lo que se presenta sino también una clara voluntad de presentar los productos de la tierra. Pero eso no será todo. Llegan otros tres platos magníficamente presentados sobre diversos soportes naturales; madera y piedra. Un pequeño trozo de tarta sobre el que encontraremos una salchicha picante muy rica con un toque de salsa picante. Mousse elaborado con agua de judías Fesols de Santa Pau y trufa. Fesols de Santa Pau la Garrotxa es una variedad de haba desgranadora enana originaria de esta comarca de la Garrotxa en Cataluña. Santa Pau (pronunciado paou, variedad muy famosa, se cultiva en las tierras volcánicas de esta región. Estas tierras le confieren un sabor ligeramente dulce y suave, lo que le confiere un gran prestigio en la gastronomía local. Granos blancos brillantes de 9 x 6,5 x 6 mm, corto, oblongo, con extremos redondeados, nada harinoso, de sabor y textura finos, que requiere poco tiempo de cocción y que aquí se trabaja en mousse y se aromatiza con trufa de la finca del restaurante, porque Ca l'Enric también es trufero.

Un dels millors restaurants de Catalunya. No se a què esperen a donar-los la segona estrella Michelin. Imprescindible el menú degustació, el qual està en constant renovació.

Restaurant pet tornar.hi el menjat es un cumul de sendacions, no es varat , pero val la pena

Un dels millors restaurants de CatalunyaNo se a què esperen a donar-los la segona estrella Michelin.